"...El precio de mercado de una obra difícilmente determine su valor simbólico, pero sin duda tiene la capacidad de influirlo...
...Desde su visión globalizadora, Graw advierte la diversidad cambiante de las alianzas entre el mercado, los artistas, los críticos y los coleccionistas a tal punto que el mercado minorista, que caracterizó al mundo de las galerías como las conocemos en la Argentina, tiende a perder peso por el efecto de las industrias corporativas -a la manera de la industria cinematográfica o editorial...
...A su vez, cuando ya resultaría imposible volver a coronar en su trono a un modelo de crítico todopoderoso como Clement_Greenberg, la influencia del crítico se amortigua y la tradicional alianza galería-crítico, impulsora del reconocimiento de la obra de sus artistas, intentaría reemplazarse por otros ejercicios de supervivencia que incluyen el fenómeno de galerista con dotes intelectuales o los artistas con vocación de marchand.
En el otro extremo, las casas de subastas respaldadas por redes de contactos, investigadores de arte que cumplen funciones como en un museo e inversiones globales promueven no sólo a las obras exitosamente sino también al artista estrella...
...Graw...ve necesario diferenciar el valor del mercado del valor de conocimiento y oponerse al dualismo simplista de arte versus mercado. Graw opina que cuanto más el artista reniega del mercado y atribuye significado a obras no fácilmente comerciables, más se fortalece el conjunto del mercado."
Américo Castilla, ensayo crítico sobre el libro ¿Cuánto vale el arte?, de Isabelle Graw, en adn cultura la nación del 15 de marzo.-
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