1954
Para paliar los efectos de la crisis económica de 1952, Perón, contrariando lo establecido en el artículo 40 de la constitución justicialista de 1949 sobre la explotación de los recursos naturales,
"...Los minerales, las caídas de agua, los yacimientos de petróleo, de carbón y de gas, y las demás fuentes naturales de energía, con excepción de los vegetales, son propiedad imprescriptibles e inalienables de la Nación, con la correspondiente participación en su producto que se convendrá con las provincias..."
comenzó a mantener contactos en 1954 con la petrolera Standard Oil de California, fundada por Rockefeller, (hoy Chevron_Corporation) que concluyeron con la firma de un acuerdo ad referendum del Poder Ejecutivo, que entre otras cosas establecía que la California -como se llamó a la subsidiaria local- debía entregar a YPF todo el petróleo que obtuviera al precio internacional menos un 5% .
El mismo se concreta el 6 de mayo, pero la petrolera norteamericana, frente al mencionado artículo, le exigió a Perón la ratificación parlamentaria, cosa que el presidente rápidamente intentó, enviando el día 9 el convenio al Congreso para ello.
Allí, se levantaron voces de rechazo, especialmente en el sector nacionalista que había acompañado desde 1946 al gobierno, y que a partir de ese acto, y luego, con la quema de las iglesias en juno de 1955, se pasó abiertamente a la oposición, participando en el levantamiento cívico-militar del 16 de setiembre, que derrocaría al primer peronismo.
El convenio con la California Argentina de Petróleo S.A., con sede en Delaware, Estados Unidos, nuca fue ratificado ni puesto en práctica.
2012
"Al menos cuatro petroleras norteamericanas están interesadas en invertir en
la YPF nacionalizada. Sin embargo exigen una condición algo difícil de
aceptar por el Gobierno nacional en estos días: que haya una ley aprobada por
el Congreso nacional que les garantice la inversión y les permita la exportación
de barriles de petróleo y el giro de utilidades al exterior.
Así se lo hicieron saber a al menos dos altos representantes del Gobierno de
Cristina de Kirchner directivos de Exxon Mobil, Chevron, ConocoPhillips y
Apache en los últimos meses..."
(Ámbito Financiero de hoy)
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