Para relanzar las relaciones anglo-británicas afectadas por la Conferencia de Ottawa -donde Gran Bretaña se había comprometido a comprar a sus dominios antes que a terceros países- y por la crisis internacional de 1930, el presidente Justo decidió enviar a Londres una misión de alto nivel.
Inmediatamente los ministros de Relaciones Exteriores Carlos Saavedra Lamas y de Agricultura -el verdadero ministro de Economía en aquellos tiempos- Antonio De Tomaso, uno de los mejore que pasaron por esa cartera, presionaron para presidirla, poniendo en apuros a Justo, quien no quería desairar a ninguno de los dos.
El canciller Saavedra Lamas, hombre vinculado por lazos de sangre con la historia argentina y la sociedad porteña, casado con la hija de Roque Sáenz Peña, que usaba levita, pantalones rayados y altos cuellos de celuloide y que sin embargo no se caracterizaba por su aseo, según el infantil recuerdo de su vecino Adolfo Bioy Casares, para forzar una definición le manifestó al presidente que De Tomaso "No era un ministro para la exportación"
Con esta desacertada frase hacía mención al orígen humilde del ministro de Agricultura, quien luego de egresar como perito mercantil del colegio Carlos Pellegrini, había ganado por concurso un puesto de taquígrafo en el Congreso, con cuyo sueldo se había costeado sus estudios de abogacía, ingresando a la política a través del Partido Socialista, y luego escindido de éste fue uno de los más destacados miembros del Partido Socialista Independiente de la Capital Federal junto con Federico Pinedo, ambos partidarios de Justo y ministros de su gabinete; Pinedo en la cartera de Hacienda.
El comentario de Saavedra Lamas llegó a oídos de De Tomaso y ardió Troya.
Justo con su cintura política característica, dio un corte al asunto y decidió entonces poner al frente de la delegación al vicepresidente Julio Roca (hijo), el que al tener mayor jerarquía que ambos ministros, fue acatado como tal por Saavedra Lamas y De Tomaso.
Durante el famoso debate sobre el tema de las carnes, curiosamente el día del atentado contra Lisandro de la Torre, Roca no presidía la sesión del Senado. Días después le dijo a su amigo Toribio Ayerza: "Si yo presido el debate, no ocurre el crímen "
Después de este luctuoso suceso, De la Torre se retiró desilusionado de la vida política, después de cuarenta años de luchas.
Un día fue a su médico y le dijo que había tenido un dolor en el corazón, y le señaló la zona que le dolía. El facultativo, tras un rápido exámen, le dijo que allí no estaba el corazón y para que no hubiera dudas sobre la zona del dolor, le dibujó la silueta del corazón en su pecho. Ya en su casa, De la Torre disparó al centro del dibujo la bala que lo mató.-
5 comentarios:
Creo que Saavedra Lamas era nieto o bisnieto de Cornelio Saavedra, que a su vez era boliviano.
Supongo, con todo el respeto, que se habrá pegado un buen baño antes de ir a recibir el Nobel.
usted dice bien bambi, don cornelio nació en potosí, pero en esa época potosí era parte del virreynato del rio de la plata, todavía no existían ni bolivia ni argentina
en cuanto al nobel, yo tambien espero que si haya sido, sino que momento!!! para el rey sueco...
Hugo, Carlos (Historia, política y autores) ha comenzado a escribir sobre la independencia de Argentina en su estupendo blog, por si te interesa darte una vuelta por allí... y a los otros comensales de este banquete...
Carlos es un joven historiador espanol, totalmente enamorado de su profesión-vocación y me parece que su blog es realmente muy bueno.
Saludos muchos!
lo hare, gracias marta por el dato
fe de erratas: en el primer párrafo debe leerse: relaciones anglo-argentina
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