En momentos en que se habla con gran superficialidad de recesión, esfuerzos, sacrificios, caída de ingresos, desocupación, como si fueran abstracciones alejadas de los seres humanos de carne y hueso, que van a sentir -sabe solo Dios- por cuantos años sus destructivas consecuencias.
Para poner en perspectiva lo que fue la Gran Depresión americana que comenzó con el crac bursátil de 1929, voy a referirme a un tema habitual en el blog: la música.
Durante la década del 20 se vendían anualmente 100 millones de discos, lo que incentivaba a comprar equipos para reproducirlos.
A partir de la depresión, las placas compradas bajaron a 7 millones anuales, lo que llevó a la difusión de la radio, donde la gente escuchaba, gratis, la música que antes compraba y reproducía en sus casas.-
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