En un artículo publicado en la página web del diario Financial Times, Nouriel Roubini consideró tres posibles salidas para la crisis:
1. Dejar caer fuertemente el valor del euro
2. Hace reformas para aumentar la productividad, poniendo un freno al alza de salarios
3. Promover la deflación, como hizo la Argentina en 2001
Cree sin embargo que ninguna de estas tres opciones funcionarán:
a. La primera, porque si bien beneficiaría a los países de la periferia europea, choca con los intereses de Alemania y la política del Banco Central Europeo.
b. La segunda, porque requeriría mucho tiempo para ver sus efectos, la situación actual requiere premura.
c. Tampoco la "vía Argentina" sería una salida, ya que esta experiencia culminó en la cesación de pagos y la ruptura del régimen de convertibilidad.
¿Entonces?
Roubini reconoce que hay solo una salida para restaurar la competitividad y el crecimiento en la periferia: salir del euro, volver a las monedas nacionales y lograr una fuerte depreciación real y nominal.
Sin embargo, reconoce que esta salida "impondría grandes pérdidas comerciales al resto de la eurozona, vía una fuerte depreciación real y pérdida de capital a los acreedores, de la misma manera que lo hizo la "pesificación" de la deuda en dólares de la Argentina durante su última crisis"
Por último, habrán advertido que resalté periféricos
¿Supone entonces Roubini que de aplicarse su propuesta, los PIG (Portugal-Irlanda-Grecia) se convertirían en países de segunda de la Unión Europea, y a a partir de este nuevo status descomprimirían la presión sobre España e Italia?
No hay comentarios:
Publicar un comentario